Con la llegada de los frentes fríos y la próxima temporada invernal, la Secretaría de Salud (SS), en coordinación con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), invita a la población en general a vacunarse contra la influenza.

Dentro del Plan de Invierno, se contemplan acciones preventivas durante los meses de octubre a marzo, las cuales incluyen fortalecer la promoción de la salud a través de la difusión de medidas preventivas y la aplicación del biológico contra la influenza en grupos vulnerables.

Los beneficios de la vacuna contra la influenza son cuatro: protege en contra de las enfermedades virales y permite disminuir hasta en un 60 por ciento la consulta al médico por enfermedades respiratorias agudas; es una vacuna segura que se utiliza tanto en el sector público, como el privado; su aplicación ayuda a romper el canal de trasmisión, lo que evita que se pueda presentar una epidemia; y por último, es una vacuna que se encuentra disponible para todas las personas en las diferentes instituciones del sector salud.

Grupos Vulnerables

Principales mitos o dudas sobre la vacunación contra la influenza

Un motivo es que las personas pueden enfermarse de otras causas como el ambiente, bacterias o virus respiratorios aparte de la influenza. La vacuna contra la influenza sólo brinda protección contra este agente y no contra otras enfermedades.
Es posible estar expuesto al virus de la influenza antes o durante dos semanas posteriores a la vacunación, éste es el periodo que demora el organismo en desarrollar la protección inmunitaria, ocasionando que una persona inicie con la enfermedad por influenza antes de que la protección de la vacuna haga efecto.

Algunas personas manifiestan tener reacciones leves a la vacuna contra la influenza. Los efectos secundarios más comunes son dolor, enrojecimiento, sensibilidad o inflamación en el sitio de aplicación. También pueden presentarse síntomas como fiebre leve, dolor de cabeza y dolores musculares. Si se presentan estas reacciones, es habitual que comiencen inmediatamente después de la inyección y duren de uno a dos días.
Las reacciones más comunes que tienen las personas frente a las vacunas contra la influenza son considerablemente menos graves que los síntomas y las complicaciones que causa la enfermedad real de la influenza.

Sí. La OMS y la OPS recomiendan la vacuna en cada temporada invernal, ya que la protección inmunitaria que adquiere una persona al vacunarse disminuye con el tiempo y puede existir la presencia de cepas virales diferentes a las de las temporadas previas.

FUENTE: Comunicación. Social – Secretaría de Salud