Con la presente situación con el covid 19, seguramente tienes muchas dudas respecto a la seguridad de salir de vacaciones en plena pandemia de coronavirus.

Ciertamente el gobierno ha comenzado a relajar las medidas de confinamiento pero es difícil hacer planes en el plano turístico. ¿Es seguro viajar? Es apropiado elegir un avión o un tren o es preferible utilizar un vehículo privado?

Sobre estas dudas, el microbiólogo Guillermo Quindós Andrés, un experto del departamento de inmunología microbiología y parasitología de la Facultad de Medicina y enfermería de la Universidad del país Vasco, extiende una serie de medidas para todo viajero que se proponga disfrutar de unas vacaciones en la playa o en el bosque en cualquier medio de transporte.

La primer medida y más importante es Cancelar cualquier tipo de viaje si nos sentimos mal. Debemos evitar viajar si tenemos cualquier síntoma de enfermedad o malestar con nuestra salud.

Para las personas que están sanas, deben realizar sus viajes con las debidas precauciones, sin olvidar que seguirá habiendo un número de futuros contagios. Debemos hacer uso del sentido común, manteniendo el distanciamiento social con las personas que no son de nuestro núcleo familiar, lavando constantemente las manos, evitar tocarnos el rostro y utilizar cubrebocas, de preferencia que sean higiénicas reutilizables de normativa.

Es muy posible que no contemos con vehículo propio o que queramos rentar uno. También es probable que el destino al que queremos llegar no pueda ser accedido por carretera. Debemos tener en cuenta que la gran mayoría de los contagios se producen en espacios cerrados, no obstante viajar en avión o en tren incrementa el riesgo de un contagio pero sí atendemos las medidas de seguridad y normas de cada compañía podemos hacer un viaje seguro.

Las normativas pueden variar según la empresa, en algunos casos podrán dejar asientos libres o muy probablemente el uso de cubrebocas será obligatorio durante todo el viaje. Los asientos más seguros suelen ser los de ventanilla ya que están aislados del pasillo. Si tienes que hacer uso de los baños en tu trayecto, o has tocado objetos con contacto constante con mucha gente, debes tener siempre presente la higiene elemental, con una mayor firmeza de lo habitual.

Es muy difícil mantener la distancia de seguridad en un viaje en avión, pero si la empresa cumple con las obligaciones de refrigeración de aire, este será relativamente seguro.

Para los que tienen pensado viajar a playas, tenemos buenas noticias: es prácticamente imposible contagiarse mediante los granos de arena que haya tocado una persona positiva. Además se ha comprobado que la radiación UV desactiva a los virus en las superficies donde se encuentran expuestos al sol.

El uso de mascarilla es altamente recomendable, sobre todo si no se puede garantizar la distancia mínima de seguridad entre otras personas. Respecto al agua de mar sería muy difícil que facilitará un contagio, sin embargo las albercas, jacuzzis y piscinas, deben de contar con sistemas de desinfección con cloro, para asegurar que no exista ninguna transmisión. Pregunta al gerente o anfitrión si tienes alguna duda al respecto.

Durante tu estancia es muy importante que extremes las medidas en lugares cerrados y de preferencia los evites, cómo lo pueden ser bares, antros, cines, teatros y restaurantes. Es mejor optar por lugares y actividades al aire libre siempre y cuando respetemos la distancia de seguridad. Recuerda que el sentido común y la precaución, es para bien tuyo y de los demás.

Fuente: https://www.ehu.eus/ehusfera/mikrobios/informacion/